De nuevo
bajo manzanos, aquí me quedo
Puse de
nuevo el “on” con algún “track” que ahora no importa mencionar y de nuevo era
momento de “pensar” bajo los manzanos; eso sí, sin la intención de ofrecer
ninguna metáfora tal vez utilizada cierto día por aquellos que escribían libros
sobre nuestra creación o aquellos que inventaban tras un paseo, pues yo me seguía
limitando a seguir pintando postales con palabras.
Curiosamente
era en aquel momento en que no tenía lápiz en mano, cuando me aparecían más
ideas absurdas o no en las que pensar, así que no me que quedaba otra que
intentar pensarlas con una misma canción de fondo, la cual reproduciría una vez
llegado a casa para poder recodarlo todo, ahora acompañado de teclas con las
que recrearme.
Supongo
que era un nuevo hábito tomado, al igual que hacer un cigarro con el primer café
de la mañana o tomarme una cerveza a la llegada del trabajo: en todos los casos
se acabarían activando eso que llaman neurotransmisores los cuales seguían
dando sentido a más de una salivación preciada.
Si esos
mismos neurotransmisores que se activaban cuando veía aquella chica que me
gustaría que fuese la madre de mis hijos aunque me siguiera viendo sin derecho
a procrear por no tener que culpar a nadie de mis defectos, aquella con la que
me gustaría pasar una noche de pasión, aquella con la que me gustaría pasar una
bonita noche sin llegarnos a tocar por respeto al miedo a perder, aquella con
la que…
Perfiles
de chicas que se iban tal vez repitiendo por resplandecer cada una de aquellas situaciones
que algún día descubrimos juntos tras una invitación mutua a conocer ese mundo
desconocido llamado amor, pasión, sexo,...; con lo cual se negaba la idea de
que no existieran islas donde naufragar.
Cada uno
de nosotros sabíamos aquello que nos hacía activar cada una de nuestras
hormonas y bien seguro que cada uno de aquellos viajes se limitaba a ser un
retrato de quien un día nos hizo descubrir dicha situación; pues la satisfacción
de poder repetir lo que nunca se consumó como una herida, sino como un
despertar, daba de nuevo respuesta a
esas mariposas en el
estómago, a esa elevación de la temperatura corporal, a esos labios resecos, a esa
voz temblorosa, a ese tartamudeo,…a esa sensación de estar fuera de la realidad
Pues tal
vez es que todos habíamos nacido bisexuales gracias a Dios, sólo hacía falta saber
quién fue el primero que nos hizo descubrir tras invitación mutua a conocer ese
mundo desconocido llamado amor, pasión, sexo,.. a partir de ese momento serían
los hombres o las mujeres quien activarían nuestras hormonas; en cuanto al tema
de Dios lo dejaba para nuevas manzanas de libros para colorear.
Curiosamente
la canción que escuchaba ahora me hacía recordar lo que había pensado esta
mañana, curiosamente la banda musical de nuestra vida nos hacía recordar cada
uno de nuestras historias; curiosamente la música no tenía sexo pero nos
transportaba felizmente a cada una de aquellos descubrimientos.
Curiosamente
mientras sigo viajando me permito hacerme preguntas como un niño pequeño; tal
vez es por esto porque no quiero dejar de viajar, porque uno se vuelve a sentir
joven y olvida su edad biológica, olvida finalmente eso que llaman “tiempo”.
Pongo el
“off” se acabó la canción para hoy. Duration: 3:52
Have my poco reflexionaba sobre la misma idea viaje = juventud. Genial lo suyo! Un abrazo inmenso!
ResponderEliminarEse maestro Argentino!!!!! un abrazo hermano!!!
ResponderEliminar