jueves, 12 de junio de 2014

Uno rápido en Boquete

Me levanto por la mañana y miro por la ventana, llueve…de nuevo cereales con leche y una taza de té con canela y mucho azúcar.

Enciendo el ordenador y me pongo al día de lo que me interesa y tal vez me doy cuenta que sólo acabo leyendo los mensajes de esa esperanzadora bandeja de entrada. Hace tiempo que se cayeron los periódicos y las gacetas de mis favoritos, o es que te tal vez nunca existieron; en cambio los amigos me ayudan a pensar que aún existo.

Cubeta con un poco de agua para que el rodillo vaya más suave y zarpada de pintura, me gustaría crear algo con los pinceles, pero a día de hoy me tengo de conformar en no sobrepasar los límites de colores no parejos ausentes de cinta. El tiempo pasa rápido allí en “la vida” entre cigarros, buena música y alguna cerveza que se avecina como fin de fiesta

Mediodía, hoy tocan lentejas ausentes de chorizo, pero caen más de dos platos. De nuevo tabaco barato y taza de café; antes de que vuelva la lluvia le vuelvo a dar un poco de tiempo a los pinceles.

Son casi las cinco, no tengo horarios, pero pronto se hace de noche aquí en “la vida”; limpia lo que has ensuciado y límpiate a ti mismo. Relajada  cerveza de media tarde, mientras veo como los pájaros se reúnen de nuevo para emigrar de la lluvia -¿tal vez tendría que hacer yo lo mismo?-momento en que aparece un “bocadillo” en mi cabeza y parece que piense.

Miro la plata que me queda y donde puedo ir que sea verano y que no sea Europa; como tonto miro la línea del ecuador arriba y abajo sin saber muy bien que significa. Busco en google “verano en julio” y busco alternativas que pueda afrontar sin tenerme que regresar corriendo en busca de un trabajo cualquiera. Rectifico, no es un trabajo cualquiera, es el mejor trabajo, ya que es el que me está manteniendo los últimos años. Perdón a los autoridades, soy un ilegal.

Vuelve a sonar una compartida “Rise” de Eddie Vedder, me encanta esta canción, pero ahora no me apetece hablar de  los tópicos de la sociedad ni de la historia de Christopher McCandless, supongo que estoy en un día de cerebro plano; pues ese mismo día he tirado por la borda desde un Albert Camus a un episodio de Epi y Blas, pues hoy no me importa nada de nadie a quien no le tenga afecto.

Sólo me quedo con el momento de la canción que dice;

“el tiempo que tenemos es demasiado corto como pararte y desaprovecharlo, porque de pronto te ves engullido y sepultado por la tierra”

Perdonar, pero ahora me diréis que es un tópico; pero lo necesitaba para continuar lo que hoy os escribía.

Primero de todo, como yo no me quiero morir,  tomo la guitarra e intento tocar “Rise”, buff complicada para un torpe no principiante , pero contento he superado algo; no me intimida desafinar y tocar la guitarra frente de la gente, así que cae un Wish you were here.

Tal vez perdí la vergüenza porque cada vez todo me importa menos aquí en “la vida”…algunos pensareis que tal vez eso es malo. No sé, yo pienso que todo lo que tenga que pasar va a pasar igualmente por mucho que te hayas creado tu propio Dios para poder creer en algo;  pues este no va a cambiar por ti. Moraleja, haz simplemente lo que pasa por tu cabeza con o sin Dios a quien claudicar.

Me levanto por la mañana y miro por la ventana,…..oferta de billete a Vancouver; tal vez me quedo sin plata en cuatro días y me aburre hablar inglés; supongo que porque no me expreso bien o porque no me importa nada, pero me apetece

Vuelve a sonar Rise, no voy de Christopher McCandless, aunque estaría bien llegar a Alaska y me trae buenos recuerdos esta canción.

Agarro la guitarra y vuele a disonar Wish you were here, la solución…So, so you


Pero no os engañéis me decido por “riSe”, sin tener que dejar atrás grandes lagunas negras ni recuerdos borrosos, pues todo parece que está bonito para los dos; me vuelvo a poner de pie en “la vida”.





No hay comentarios:

Publicar un comentario